Paisaje marino americano pintado por Hermann Herzog con barcos de pesca

Centenario, Hermann Herzog era conocido por sus paisajes y marinas, así como por muchas vistas de Noruega. Tuvo un papel destacado durante su vida, y entre sus coleccionistas se encontraban la reina Victoria y el zar Alejandro II. Nació en Bremen (Alemania) e, intrigado por el potencial que ofrecía América, emigró a Estados Unidos cuando tenía veintitantos años y se estableció en Filadelfia. Le fascinaba la variedad del paisaje y viajó mucho por Oriente, Occidente y, a mediados de la década de 1870, a México. También hizo muchos viajes a Florida, donde visitó a su hijo Herman Jr., químico en Gainesville, y pintó el exótico paisaje con altísimas palmeras. Fue un sabio inversor de dinero y, debido a la temprana compra de acciones del Ferrocarril de Pensilvania, no se esforzó por vender su obra en vida. Su pintura estuvo a punto de caer en el olvido hasta 1971, cuando uno de sus nietos empezó a dar a conocer sus cuadros, y en 1992 se celebró una exposición retrospectiva de su obra.